En los últimos veinte años la memoria se plantea como uno de los temas importantes en el debate político y cultural. Asistimos no sólo al florecimiento de memorias escritas y orales – sobre todo de hechos traumáticos – sino también a una reflexión teórica y metodológica muy sofisticada sobre los mecanismos mismos de su funcionamiento, de sus formas de representar el pasado, su relación con la historia. La memoria se constituye como ámbito específico de investigación interdisciplinaria.\América Latina participa activamente en esta producción de memorias y de reflexiones alrededor de ella, aportando memorias derivadas de las vivencias de las dictaduras militares de las décadas de los senta-ochenta, de las violaciones de los derechos humanos, y también de las transiciones democráticas.\Desde AHILA vemos necesario introducir algunos de los elementos en discusión sobre la relación historia-memoria. Relación que tiene que ser replanteada ya que es dinámica, cambia en el tiempo y se define según los sucesos y procesos que caracterizan nuestra época. Además se siente la necesidad de una reflexión porque, sobre todo en América Latina, se está corriendo el riesgo de confundir los dos conceptos, considerando la producción de memorias como producción historiográfica.\Los ensayos que aquí se presentan tratan de responder, enfrentando cada uno distintos temas y problemas historiográficos, los siguientes interrogantes: ¿Cómo se replantea hoy en día la relación entre historia y memoria? ¿Es posible hacer “historia del tiempo presente”? ¿Cuáles son los riesgos y los límites de una reflexión sobre procesos todavía abiertos? ¿Con qué tipos de fuentes pueden trabajar los historiadores? ¿Cómo se plantea el problema del uso público de la historia?

Teoría de la historia