Hora de la filosofía, hora de la felicidad : El motivo de la temporalidad en la Carta a Meneceo / Pablo Oyarzún R.
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ArticlePublication details: Universidad de Chile 1999 Santiago, ChileDescription: pp. 77-104Subject(s):
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Revista de Historia IndígenaSummary: Las primeras líneas de la Carta a Meneceo bastan para una presentación introductoria del asunto que nos interesa: \Epicuro a Meneceo, salud.\Que nadie, por joven, tarde en filosofar, ni, por viejo, se fatigue de filosofar. Pues para nadie es demasiado pronto ni demasiado tarde en lo que atañe a la salud del alma. El que dice que aún no ha llegado la hora de filosofar o que ya pasó es semejante al que dice que la hora de la felicidad no viene o que ya no está presente. De modo que han de filosofar tanto el joven como el viejo; uno, para que, envejeciendo, se rejuvenezca en bienes por la gratitud de los acontecidos, el otro, para que, joven, sea al mismo tiempo anciano por la ausencia de temor ante lo venidero.Summary: Las primeras líneas de la Carta a Meneceo bastan para una presentación introductoria del asunto que nos interesa: \Epicuro a Meneceo, salud.\Que nadie, por joven, tarde en filosofar, ni, por viejo, se fatigue de filosofar. Pues para nadie es demasiado pronto ni demasiado tarde en lo que atañe a la salud del alma. El que dice que aún no ha llegado la hora de filosofar o que ya pasó es semejante al que dice que la hora de la felicidad no viene o que ya no está presente. De modo que han de filosofar tanto el joven como el viejo; uno, para que, envejeciendo, se rejuvenezca en bienes por la gratitud de los acontecidos, el otro, para que, joven, sea al mismo tiempo anciano por la ausencia de temor ante lo venidero.
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| Analítica de revista | Biblioteca Central Colección General | General | REV. FILOS.-53-54/99 (Browse shelf(Opens below)) | 1 | Available | FICTICIO15064 |
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En: Revista de filosofía, no. 53-54, 1999. p. 77-104. ISSN 00348236.
En: Revista de filosofía, no. 53-54, 1999. p. 77-104. ISSN 00348236.
Las primeras líneas de la Carta a Meneceo bastan para una presentación introductoria del asunto que nos interesa: \Epicuro a Meneceo, salud.\Que nadie, por joven, tarde en filosofar, ni, por viejo, se fatigue de filosofar. Pues para nadie es demasiado pronto ni demasiado tarde en lo que atañe a la salud del alma. El que dice que aún no ha llegado la hora de filosofar o que ya pasó es semejante al que dice que la hora de la felicidad no viene o que ya no está presente. De modo que han de filosofar tanto el joven como el viejo; uno, para que, envejeciendo, se rejuvenezca en bienes por la gratitud de los acontecidos, el otro, para que, joven, sea al mismo tiempo anciano por la ausencia de temor ante lo venidero.
Las primeras líneas de la Carta a Meneceo bastan para una presentación introductoria del asunto que nos interesa: \Epicuro a Meneceo, salud.\Que nadie, por joven, tarde en filosofar, ni, por viejo, se fatigue de filosofar. Pues para nadie es demasiado pronto ni demasiado tarde en lo que atañe a la salud del alma. El que dice que aún no ha llegado la hora de filosofar o que ya pasó es semejante al que dice que la hora de la felicidad no viene o que ya no está presente. De modo que han de filosofar tanto el joven como el viejo; uno, para que, envejeciendo, se rejuvenezca en bienes por la gratitud de los acontecidos, el otro, para que, joven, sea al mismo tiempo anciano por la ausencia de temor ante lo venidero.
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