Este libro agrupa cartas de pacientes de la antigua Casa de Orates, escritas en las primeras décadas del siglo XX. Constituyen documentos de vidas mínimas, que preservan rastros de biografías tanto más disminuidas cuanto se refieren a sujetos recluidos, a hombres y mujeres cuya misma demencia, sancionada socialmente, solía invalidarles como interlocutores dignos de atención. Nunca enviadas a sus destinatarios originales, estas cartas resultan igualmente valiosas como documentos clínicos e históricos. Hasta ahora la investigación histórica sobre la locura ha arrojado una luz más bien oblicua sobre la condición personal de los internos, dejando en la penumbra las zonas del delirio. Sucede todo lo contrario con los testimonios aquí compilados: su riqueza documental remite al universo y al lenguaje de los alienados, no ya al oficio, al discurso y a la actuación de médicos y filántropos. De ahí que estas cartas representen algo fuera de lo común: aportan el testimonio en bruto de hombres y mujeres que sufrieron enfermedades mentales. Son, en suma, comunicaciones nacidas al interior del universo de la reclusión psiquiátrica.