Sanhueza Carvajal, Raúl AndrÈs

La experiencia de gobierno del Partido Popular español, 1996-2004 / Raúl AndrÈs Sanhueza Carvajal. - Santiago, Chile Academia Diplomática de Chile "Andrés Bello 2005 - pp. 30-56

Diplomacia / Academia Diplomática de Chile Andrés Bello. (Santiago, Chile). No. 102 (abr./jun. 2005), p. 30-56. Diplomacia / Academia Diplomática de Chile Andrés Bello. (Santiago, Chile). No. 102 (abr./jun. 2005), p. 30-56.

El Gobierno del Partido Popular (PP) en España ha sido objeto de diversos análisis. Para algunos autores, el PP representó la emergencia de una centro-derecha renovada y moderna cuya ascensión representó, en una visión idealizada, la culminación de la transición española a la democracia. En este sentido, el período de gobiernos populares (1996-2004) ha motivado variadas interpretaciones, que han considerado que su abrupta derrota en las elecciones de 2004 se debió a acontecimientos posteriores a los atentados del 11 de marzo de 2004. Sin embargo, un análisis detenido de estos ocho años muestra que el PP fue víctima de un doble fenómeno: por una parte, el proceso de afirmación reformista emprendido en 1998 no fue suficientemente creíble para los electores de centro, quienes siguieron considerando al PP como una fuerza de derecha. Al mismo tiempo, esta operación fue demasiado creíble para una porción minoritaria del electorado conservador que, puesto a elegir entre visiones similares, prefirió abstenerse de votar. La lección que se puede obtener de la experiencia de José María Aznar es que el poder debe ejercerse con coherencia y humildad, porque aun en sistemas de monopolio de oferta política, la decisión recae siempre en el elector. El Gobierno del Partido Popular (PP) en España ha sido objeto de diversos análisis. Para algunos autores, el PP representó la emergencia de una centro-derecha renovada y moderna cuya ascensión representó, en una visión idealizada, la culminación de la transición española a la democracia. En este sentido, el período de gobiernos populares (1996-2004) ha motivado variadas interpretaciones, que han considerado que su abrupta derrota en las elecciones de 2004 se debió a acontecimientos posteriores a los atentados del 11 de marzo de 2004. Sin embargo, un análisis detenido de estos ocho años muestra que el PP fue víctima de un doble fenómeno: por una parte, el proceso de afirmación reformista emprendido en 1998 no fue suficientemente creíble para los electores de centro, quienes siguieron considerando al PP como una fuerza de derecha. Al mismo tiempo, esta operación fue demasiado creíble para una porción minoritaria del electorado conservador que, puesto a elegir entre visiones similares, prefirió abstenerse de votar. La lección que se puede obtener de la experiencia de José María Aznar es que el poder debe ejercerse con coherencia y humildad, porque aun en sistemas de monopolio de oferta política, la decisión recae siempre en el elector.