Adiós a la razón
Paul Feyeraben.
- 3 ed
- Madrid: Tecnos, 1996.
- 195 p.
La ascensión del racionalismo en Occidente es el resultado de dos desarrollos, uno gradual e involuntario, y otro más bien repentino y basado en la obra de un pequeño grupo de intelectuales. El primer desarrollo reemplazó los conceptos ricos y dependientes de la situación, propios de la primitiva épica, por unas pocas ideas abstractas e independientes de la situación. El segundo desarrollo dio comienzo con el descubrimiento, efectuado algo antes por Parménides, de que las ideas abstractas e independientes de la situación generan historias especiales, pronto llamadas “pruebas” o “argumentos”, cuya trama no es impuesta a los caracteres principales, sino que “se sigue de” la naturaleza de ellos.