En: Estudios de Periodismo y Relaciones Públicas. Año V, no. 5, 2005. pp. 43-50. ISSN: 0718-1205.

No se puede desconocer que en la revolución multimedia la imagen se ha impuesto por sobre lo inteligible, instalando un modelo de tele-ver (Verón), ver sin entender, tanto así que nuestra sensibilidad (capacidad de reconocimiento del otro, de la alteridad del otro) queda congelada ante el exceso de simulacro. Pero, no perdamos de vista la responsabilidad que le cabe a la imagen más allá de su origen y rescatarla desde lo moral, asociándola a un curso alternativo de su historia. La idea es hacer otra lectura en la que la fuerza de la imagen sea vista, recogiendo algunas ideas de Carlos Thiebaut, como movimiento entre el daño causado y el rechazo.