He aquí una historia moderna en torno a la práctica secular del curandeismo y al mismo tiempo un retrato de un individuo extraordinario, Eduardo Calderón Palomino, escultor, maestro y chamán peruano. Mas que una biografía este es un agudo análisis de la visión del mundo de un curandero contemporáneo, de su arte, de sus bregas y de su búsqueda personal de sentidos.\Douglas Sharon, vivió 4 años con Eduardo, lo interrogóa largamente y hasta fue su aprendiz. Pocos chamanes han aceptado exponer así su saber esotérico y dejar presenciar sus ritos a los no iniciados. El resultado de esta labor es la revelación de un sincretismo, pues Eduardo y sus pacientes se tienen por católicos devotos, pero no ven contradicción entre su religión y la práctica del curanderismo. Se demuestra que en toda Amércia Latina los chamanes ocupan análogos objetos de poder y comparten una cosmología notablemente similar, de gran antigüedad: las creencias y técnias de Eduardo el chamán se remonten a tres mil años atrás.

Antropología médica