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100	1		_aSarramona, Jaime
245	1	0	_aParticipación y calidad de la educación / _cJaüme Sarramona López.
260			_bPontificia Universidad Católica de Chile _c1999 _aSantiago, Chile
300			_ap. 13-33
500			_aEn: Pensamiento educativo, nû24, 1999. p. 13-33. ISSN 07171013.
500			_aEn: Pensamiento educativo, n°24, 1999. p. 13-33. ISSN 07171013.
500			_aEn: Pensamiento educativo, nç24, 1999. p. 13-33. ISSN 07171013.
520			_aLa participación social en el sistema educativo constituye una dimensión de la democracia social. La naturaleza misma de la educación escolar demanda de la participación de todos los sectores implicados para lograr sus metas, lo cual no se consigue con exclusivas dosis de voluntarismo, sino que requiere de información y de organización institucional para hacerla efectiva. Los Consejos Escolares son los órganos creados al efecto.\La participación se vincula a la calidad de la educación escolar en tanto interviene en los elementos básicos de dicha calidad: planificación, actuación eficaz y evaluación. Ciertamente, el papel que corresponden a los diversos sectores no es el mismo, de modo que será preciso delimitar la intervención de unos y otros, preservando tanto la profesionalidad del profesorado, como la responsabilidad de las familias, la implicación necesaria de los alumnos en el proceso y la gestión legal y administrativa de las autoridades públicas. La participación se vincula también con la descentralización, que permite acercar la educación a las realidades de cada contexto social y grupos de alumnos.\Aunque la demanda de participación social en el sistema educativo debe vencer dificultades, fruto de la falta de tradición en algunos casos y de la presión ideológica neoliberal en otros, es preciso avanzar en su generalización, para lograr hacer de la educación escolar una actividad coherente y coordinada frente a los modelos distorcionantes que a menudo se encuentran fuera de la escuela.
520			_aLa participación social en el sistema educativo constituye una dimensión de la democracia social. La naturaleza misma de la educación escolar demanda de la participación de todos los sectores implicados para lograr sus metas, lo cual no se consigue con exclusivas dosis de voluntarismo, sino que requiere de información y de organización institucional para hacerla efectiva. Los Consejos Escolares son los órganos creados al efecto.\La participación se vincula a la calidad de la educación escolar en tanto interviene en los elementos básicos de dicha calidad: planificación, actuación eficaz y evaluación. Ciertamente, el papel que corresponden a los diversos sectores no es el mismo, de modo que será preciso delimitar la intervención de unos y otros, preservando tanto la profesionalidad del profesorado, como la responsabilidad de las familias, la implicación necesaria de los alumnos en el proceso y la gestión legal y administrativa de las autoridades públicas. La participación se vincula también con la descentralización, que permite acercar la educación a las realidades de cada contexto social y grupos de alumnos.\Aunque la demanda de participación social en el sistema educativo debe vencer dificultades, fruto de la falta de tradición en algunos casos y de la presión ideológica neoliberal en otros, es preciso avanzar en su generalización, para lograr hacer de la educación escolar una actividad coherente y coordinada frente a los modelos distorcionantes que a menudo se encuentran fuera de la escuela.
520			_aLa participaciÛn social en el sistema educativo constituye una dimensiÛn de la democracia social. La naturaleza misma de la educaciÛn escolar demanda de la participaciÛn de todos los sectores implicados para lograr sus metas, lo cual no se consigue con exclusivas dosis de voluntarismo, sino que requiere de informaciÛn y de organizaciÛn institucional para hacerla efectiva. Los Consejos Escolares son los Ûrganos creados al efecto.\La participaciÛn se vincula a la calidad de la educaciÛn escolar en tanto interviene en los elementos b·sicos de dicha calidad: planificaciÛn, actuaciÛn eficaz y evaluaciÛn. Ciertamente, el papel que corresponden a los diversos sectores no es el mismo, de modo que ser· preciso delimitar la intervenciÛn de unos y otros, preservando tanto la profesionalidad del profesorado, como la responsabilidad de las familias, la implicaciÛn necesaria de los alumnos en el proceso y la gestiÛn legal y administrativa de las autoridades públicas. La participaciÛn se vincula tambiÈn con la descentralizaciÛn, que permite acercar la educaciÛn a las realidades de cada contexto social y grupos de alumnos.\Aunque la demanda de participaciÛn social en el sistema educativo debe vencer dificultades, fruto de la falta de tradiciÛn en algunos casos y de la presiÛn ideolÛgica neoliberal en otros, es preciso avanzar en su generalizaciÛn, para lograr hacer de la educaciÛn escolar una actividad coherente y coordinada frente a los modelos distorcionantes que a menudo se encuentran fuera de la escuela.
759			_aPP160
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900			_aPENSAMIENTO EDUCATIVO-24/99
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