000 08128cab a2200325 a 4500
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003 UAHC_CL
005 20170803124645.0
008 031122s1989 cl 000 spa
040 _aUAHC_CL
_cUAHC_CL
_dUAHC_CL
100 1 _aSepúlveda Mellado, Orlando
245 1 3 _aLa vivienda social de desarrollo progresivo en una perspectiva regionalizada /
_cOrlando Sepúlveda Mellado y Gustavo Carrasco PÈrez.
260 _bUniversidad de Chile
_c1989
_aSantiago, Chile
300 _app. 7-36
500 _aEn: Revista INVI, no. 07, 1989. p. 7-36. 07181299.
520 _aChile presenta en el campo de la vivienda social una antigua, variada y rica experiencia, promovida e impulsada en sus orígenes por personas, organismos e instituciones tanto de carácter privado como público, actuando por lo general como respuesta a los daños provocados por catástrofes naturales y a los problemas sociales derivados de las condiciones de hacinamiento e insalubridad en las que se encontraban crecientes sectores de la población urbana.\Durante el presente siglo, el sector público adquiere un rol gravitante en la acción habitacional dirigida a los sectores sociales más modestos.\Dicha acción, sin embargo, por el carácter centralista de la organización político-administrativo del país y del aparato estatal, tiende a reproducir a escala nacional, aquellas tipologías habitacionales que se han implementado y desarrollado para las áreas centrales del país, sin incorporar, o incorporando insuficientemente determinadas características del medio físico y social de regiones y lugares en los que el patrón habitacional central no funciona en forma adecuada.\Este modo de operar centralizadamente en la toma de decisiones ha comenzado a ser modificado y corregido a partir de la creación, a fines de 1973, de la Comisión de Reforma Política Administrativa (CONARA), y de lapromulgación de las leyes relativas a la institucionalidad municipal 1.\Ahora bien, la preocupación por considerar e incorporar al diseño habitacional aquellas variables de índole físico como socio-cultural, acordes con el lugar en el que se propone emplazar un determinado conjunto habitacional de carácter social, debiera inscribirse en este proceso descentralizador, toda vez que, al igual que en otras materias, son las instancias del gobierno local y regional quienes mejor pueden conocer los requerimientos específicos del medio en vista del logro de soluciones habitacionales más adecuadas y por ende, más eficientes.\Siendo el país, un país de contrastes, por su propia conformación físico-ambiental y social no parece del todo lógico reproducir indistintamente tipologías habitacionales similares con variaciones menores, en lugares tan diferentes, como podrían ser, por ejemplo, Antofagasta y Puerto Montt.
520 _aChile presenta en el campo de la vivienda social una antigua, variada y rica experiencia, promovida e impulsada en sus orígenes por personas, organismos e instituciones tanto de carácter privado como público, actuando por lo general como respuesta a los daños provocados por catástrofes naturales y a los problemas sociales derivados de las condiciones de hacinamiento e insalubridad en las que se encontraban crecientes sectores de la población urbana.\Durante el presente siglo, el sector público adquiere un rol gravitante en la acción habitacional dirigida a los sectores sociales más modestos.\Dicha acción, sin embargo, por el carácter centralista de la organización político-administrativo del país y del aparato estatal, tiende a reproducir a escala nacional, aquellas tipologías habitacionales que se han implementado y desarrollado para las áreas centrales del país, sin incorporar, o incorporando insuficientemente determinadas características del medio físico y social de regiones y lugares en los que el patrón habitacional central no funciona en forma adecuada.\Este modo de operar centralizadamente en la toma de decisiones ha comenzado a ser modificado y corregido a partir de la creación, a fines de 1973, de la Comisión de Reforma Política Administrativa (CONARA), y de lapromulgación de las leyes relativas a la institucionalidad municipal 1.\Ahora bien, la preocupación por considerar e incorporar al diseño habitacional aquellas variables de índole físico como socio-cultural, acordes con el lugar en el que se propone emplazar un determinado conjunto habitacional de carácter social, debiera inscribirse en este proceso descentralizador, toda vez que, al igual que en otras materias, son las instancias del gobierno local y regional quienes mejor pueden conocer los requerimientos específicos del medio en vista del logro de soluciones habitacionales más adecuadas y por ende, más eficientes.\Siendo el país, un país de contrastes, por su propia conformación físico-ambiental y social no parece del todo lógico reproducir indistintamente tipologías habitacionales similares con variaciones menores, en lugares tan diferentes, como podrían ser, por ejemplo, Antofagasta y Puerto Montt.
520 _aChile presenta en el campo de la vivienda social una antigua, variada y rica experiencia, promovida e impulsada en sus orÌgenes por personas, organismos e instituciones tanto de car·cter privado como público, actuando por lo general como respuesta a los daÒos provocados por cat·strofes naturales y a los problemas sociales derivados de las condiciones de hacinamiento e insalubridad en las que se encontraban crecientes sectores de la poblaciÛn urbana.\Durante el presente siglo, el sector público adquiere un rol gravitante en la acciÛn habitacional dirigida a los sectores sociales m·s modestos.\Dicha acciÛn, sin embargo, por el car·cter centralista de la organizaciÛn polÌtico-administrativo del paÌs y del aparato estatal, tiende a reproducir a escala nacional, aquellas tipologÌas habitacionales que se han implementado y desarrollado para las ·reas centrales del paÌs, sin incorporar, o incorporando insuficientemente determinadas caracterÌsticas del medio fÌsico y social de regiones y lugares en los que el patrÛn habitacional central no funciona en forma adecuada.\Este modo de operar centralizadamente en la toma de decisiones ha comenzado a ser modificado y corregido a partir de la creaciÛn, a fines de 1973, de la ComisiÛn de Reforma PolÌtica Administrativa (CONARA), y de lapromulgaciÛn de las leyes relativas a la institucionalidad municipal 1.\Ahora bien, la preocupaciÛn por considerar e incorporar al diseÒo habitacional aquellas variables de Ìndole fÌsico como socio-cultural, acordes con el lugar en el que se propone emplazar un determinado conjunto habitacional de car·cter social, debiera inscribirse en este proceso descentralizador, toda vez que, al igual que en otras materias, son las instancias del gobierno local y regional quienes mejor pueden conocer los requerimientos especÌficos del medio en vista del logro de soluciones habitacionales m·s adecuadas y por ende, m·s eficientes.\Siendo el paÌs, un paÌs de contrastes, por su propia conformaciÛn fÌsico-ambiental y social no parece del todo lÛgico reproducir indistintamente tipologÌas habitacionales similares con variaciones menores, en lugares tan diferentes, como podrÌan ser, por ejemplo, Antofagasta y Puerto Montt.
650 4 _aARQUITECTURA Y CLIMA
_zCHILE
650 4 _aVIVIENDAS SOCIALES
_zCHILE
653 _aPEDAGOGIA EN HISTORIA Y CIENCIAS SOCIALES
653 _aLICENCIATURA EN HISTORIA
700 1 _aCarrasco Pérez, Gustavo
_d1948
700 1 _aCarrasco Pérez, Gustavo
_d1948
759 _aPP155
773 0 _tRevista mexicana de sociología
_w041118
856 _uhttp://www.revistainvi.uchile.cl/index.php/INVI/article/view/88/592
_3Acceso electrónico al documento
_yLa vivencia soacial de desarrollo progresivo en una perspectiva regionalizada
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_3Acceso electrónico al documento
_yLa vivencia soacial de desarrollo progresivo en una perspectiva regionalizada
900 _aREVISTA INVI-07/89
942 _cREVA
999 _c42090
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