Las culturas corporativas y las culturas propias de cada nación difieren en sus respectivas lógicas. Muchas personas ni siquiera conciben la existencia de diferentes lógicas. Las fricciones que se producen ocasionalmente en una fusión, en un joint venture o en la instalación de una filial en un lugar determinado, se deben, no solamente a diferencias en metas y objetivos, sino también a diferencias de criterios aun cuando las metas y los objetivos sean los mismos. Hasta muy recientemente, cada cultura corporativa o nacional era considerada homogénea en su lógica. Pero en cualquier cultura, la heterogeneidad individual, expresada en diferentes tipos epistemológicos, existe bajo una superficie de homogeneidad. La clave para el éxito de una gestión en un medio multicultural es descubrir e instrumentalizar las estructuras mentales ocultas como puentes e implementar combinaciones que resulten beneficiosas para todas las partes concernidas. Valiéndose de su rica experiencia en diversos países, el autor explica como descubrir y utilizar las estructuras ocultas, apoyándose para ello en historias reales del mundo empresarial.